Mark Lanegan Band- Sala Apolo, 02/04/2012, BCN.

Me resulta curioso como Lanegan se ha ganado la redención de un público que va más allá del estrictamente rockero de sus primeros años en solitario (por no decir de los de Screaming Trees) o del que acompañaba a su amigo Homme en QOTSA, sus colaboraciones en otros círculos le han hecho ampliar su radio de recepción en cuanto a respuesta del publico. Así mismo, se ha acentuado todavía más la propuesta oscura de sus shows, con apenas luces dejándonos ver a la banda y con un movimiento mínimo de dedos siguiendo el ritmo sobre el micro por parte del líder de la “manada” y alguna concesión mínima en forma de “Thanks”, que contrasta con su reciente propuesta musical que resulta mucho más luminosa.

Su repertorio actual se centra en sus dos últimos albums (incomprensiblemente “Bleeding Muddy Water” que do fuera del Set List”), pocos recuerdos para sus primeras etapas en solitario, pero eso sí, una pequeña gema de Screaming Trees a mediado el show “Crawlspace” que suena realmente rockera y que te hace pensar en lo increíble de un show de reunión de la banda. A nivel instrumental todo suena más orgánico que en el último album, siendo el guitarra solista de la banda el que para mi más destaca, poco a poco haciéndose fuerte en sus sitio, subiendo el volumen progresivamente de su amplificador y centrando las miradas a parte de las dedicadas a su jefe, por otra parte la sección rítmica cumple junto al teclista//guitarra, pero transmiten la sensación de querer ofrecernos más pegada pero no poder, imagino que por ordenes expresas.Durante la noche pudimos comprobar que con un concierto de menos a más la banda poco a poco fue compactándose y ofreciéndonos un show sólido, donde curiosamente los temas que mejor respuesta tienen son los más enérgicos y que menos se acercan al “acostumbrado” universo Lanegan, con un “Ode To Sad Disco” que se alza vencedor y donde curiosamente juegan un papel muy importante los arreglos de guitarra, en un tema plagado de efectos al más puro estilo de la película “Drive”, el Rock Stoniano y coreable de “Riot in My House”, aunque algo orientado hacia el “Indie” y el fin de fiesta con un “Methamphetamine Blues” de sonido industrial y de esencia Tom Waits completa un show que si bien, sobre toso en su primera parte, salvo con temazos como “Hit The City” es un poco lineal a partir de la mitad hacia delante es realmente intenso.Fotos by “The Beautiful” Sophie.